Feria de emprendimiento en Rafael Uribe Uribe
Un triunfo
colectivo impulsado principalmente por mujeres locales emprendedoras.
Desde una perspectiva institucional, la feria cumplió con
varios objetivos estratégicos; activar la economía local mediante la promoción
de unidades de producción de base comunitaria; generar canales directos de
comercialización para microemprendimientos y consolidar la Mesa Local como
interlocutora válida ante entes territoriales y organizaciones aliadas. En
términos comunitarios, esta actividad fue un espacio de encuentro, aprendizaje
y reconocimiento mutuo; colectivos, asociaciones, emprendimientos individuales
y proyectos autogestionados compartieron saberes, ventas y experiencias,
alimentando lazos que trascienden la jornada.
El papel de las mujeres fue central y simbólico. No se trató únicamente de una alta
participación numérica; su liderazgo se manifestó en la organización de
puestos, en la oferta de productos y servicios con alto valor agregado, y en la
capacidad de convertir sus historias personales en propuestas económicas
sostenibles. Esta presencia activa confirma que las políticas locales y los
procesos de acompañamiento técnico deben
incorporar de manera prioritaria enfoques de género que reconozcan y amplíen
las ofertas productivas lideradas por mujeres.
Logros observables
Visibilidad y comercialización; numerosos emprendimientos
cerraron ventas inmediatas y recibieron solicitudes de pedido a futuro, lo que
indica un impacto económico directo para emprendimientos micro y pequeños.
Articulación y contactos; la feria facilitó encuentros entre
emprendimientos y organizaciones del sector social, posibles aliados logísticos
y canales de distribución comunitarios.
Formación e intercambio; talleres breves e intercambio de
saberes, al igual que algunas demostraciones permitieron transferir prácticas
productivas y estrategias de mercadeo adaptadas al contexto local.
Reconocimiento ciudadano; Este momento historico fue tambien escenario oportuno para brindarles un reconocimiento publico, por parte de la Mesa Local a algunos de los lideres locales, la afluencia de visitantes —vecinos, representantes de organizaciones locales, lideres sociales y funcionarios— contribuyó a valorar el esfuerzo colectivo y a legitimar la Mesa Local como actor de desarrollo económico.
Lecciones aprendidas y recomendaciones.
N.E. Consolidar la sostenibilidad; las ferias deben entenderse como
parte de una estrategia sostenida, no como eventos aislados. Se recomienda
diseñar un calendario regular de actividades (trimestral o semestral) y
mecanismos de seguimiento para los emprendimientos que participaron.
Acompañamiento técnico con enfoque integral; junto con
formación en habilidades productivas y comerciales, es prioritario ofrecer
asistencia en formalización, acceso a microcréditos solidarios, etiquetado y
control de calidad. Esto potenciará la capacidad de escalar y acceder a
mercados más amplios.
Enfoque de género transversal; promover líneas de apoyo
específicas para emprendimientos liderados por mujeres,principalmente”
—incubación, capacitaciones en gestión financiera y acceso prioritario a
fondos— fortalecerá la equidad económica local.
Comunicación y visibilidad; con la participacion de cinco medios
comunitarios y alternativos locales, como fueron: Revista BC de la salud, El
corazon de tu Ciudad, Recreando Ando, la Emisora Salsa y Son y El usuario de la salud, permitio documentar y
difundir resultados —a través de boletines, redes comunitarias y sus propios
espacios de base, permitio que se multiplicará el impacto permitiendo de esa
forma atraer más aliados, compradores, institucionales y financiadores.
Articulación con instancias públicas; aprovechando los contactos
establecidos permitio el gestionar recursos y nuevos espacios de
comercialización en la localidad, al igual que permitio la oportunidad a un
futuro no muy lejano para participar en procesos presupuestales del distrito.
Conceptos
institucionales y comunitarios.
El éxito de esta experiencia demuestro que la economía
solidaria es una herramienta efectiva para la reconstrucción del tejido social
y la generación de oportunidades económicas inclusivas. Cuando las políticas
públicas se alinean con prácticas comunitarias —respetando autonomía, saberes
locales y liderazgo femenino— se crean condiciones para una economía más justa
y resiliente. Desde el punto de vista comunitario, las ferias son espacios
políticos; que permiten negociar condiciones de mercado, construir ciudadanía
económica y reafirmar la dignidad del trabajo cotidiano.
Voces y
relatos.
Los testimonios recogidos entre las y los participantes dan cuenta de una
mezcla de orgullo y expectativa; muchas y muchos expresaron que la feria les
permitió validar sus proyectos, recibir retroalimentación directa de los
compradores y abrir la posibilidad de alianzas con otras iniciativas. Más allá
de las cifras, el valor simbólico de reconocerse mutuamente como agentes
productivos tiene un efecto multiplicador en la autoestima comunitaria y en la
percepción pública del papel de las mujeres en la economía local.
Cierre y
llamado a la acción.
La feria realizada el
12 -del 12- 20 25 en Rafael Uribe Uribe no solo ofreció un espacio de economía
y mercado; dejó en evidencia una potencia social que exige acompañamiento
sostenido; presupuesto, formación técnica, infraestructura mínima y canales de
comercialización estables. En ese sentido, corresponde a la Mesa Local y a las
entidades territoriales aprovechar el momento para institucionalizar apoyos
concretos que permitan escalar los impactos observados.
Invitamos a las autoridades locales, organizaciones de la
sociedad civil y redes de apoyo técnico a reconocer este éxito con acciones
concretas; priorizar procesos de compra pública a emprendimientos locales,
abrir convocatorias de apoyo técnico con enfoque de género, y garantizar la
participación de la Mesa Local en la planeación presupuestal del próximo año.
De ese modo transformaremos una jornada exitosa en un motor permanente de
desarrollo comunitario.
Finalmente, rendimos un homenaje a las mujeres emprendedoras
—empoderadas y berracas— cuyo liderazgo fue el corazón del evento. Su
iniciativa y coraje configuran no solo una oportunidad económica, sino una
esperanza colectiva para Rafael Uribe Uribe.
Revista ABC de la Salud.
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